domingo, 4 de octubre de 2015

Consecuencias del uso de los Satélites Artificiales -Brenda Alejandra Vazquez Cervantes

CONSECUENCIAS DEL USO DE LOS SATÉLITES ARTIFICIALES


Se le llama basura espacial o chatarra espacial a cualquier objeto artificial sin utilidad que órbita la Tierra. Se compone de cosas tan variadas como grandes restos de cohetes y satélites viejos, restos de explosiones, o restos de componentes de cohetes como polvo y pequeñas partículas de pintura.
La basura espacial se ha convertido en una preocupación cada vez mayor en estos últimos años, puesto que las colisiones a velocidades orbitales pueden ser altamente perjudiciales para el funcionamiento de los satélites y pueden también producir aún más basura espacial en un proceso llamado Síndrome de Kessler. La Estación Espacial Internacional está blindada para atenuar los daños debido a este peligro.
En español también se denomina a esta basura espacial "débris", que es como suele denominarse en inglés (Su traducción es escombro), aunque el término no está recogido aún en la RAE. 
En el año 2014, la Agencia espacial rusa propuso un proyecto de construcción de un aparato que iría eliminando una parte de la basura espacial, comenzando en la órbita geoestacionaria. Según el proyecto, el costo sería de aproximadamente 10 mil millones de rublos (300 millones de dólares) y el plazo del proyecto está proyectado entre los años 2016 y 2025. El proyecto consiste en un aparato de 4 toneladas que en cada lanzamiento sería capaz de sacar de la órbita unos 10 satélites, el en lapso de 6 meses. Lo que haría el aparato es llevar a los satélites inservibles a una órbita cementerio (de mayor altura que la geoestacionaria).




EJEMPLO DE LO QUE SUCEDE CON LA BASURA ESPACIAL A CAUSA DE LOS SATÉLITES.



Esta basura espacial se produce por los satélites viejos que giran al rededor de nuestro planeta tierra y que gracias a tantos años de uso se han desgastado y por lo tanto se han ido destruyendo, la basura espacial es uno de los grandes problemas que generan los satélites ya que estas muchas veces son las que provocan por su alta velocidad, con la que giran; problemas a los demás satélites los cuales empiezan a tener mal funcionamiento y provocan aun mas basura.


ELABORADO POR : VAZQUEZ CERVANTES BRENDA ALEJANDRA 




Los Satelites Artificiales Y El Software Libre - Erika Eli Mtz Rodriguez



LOS SATÉLITES ARTIFICIALES Y EL SOFTWARE LIBRE





 Los satélites artificiales surgieron de la necesidad de establecer enlaces confiables de comunicación internacional de amplia cobertura, especialmente entre continentes, tanto como para la comunicación telefónica, telegráfica, televisión y de datos [9]. El físico y escritor de ciencia ficción Arthur C. Clarke [1] propuso la idea de aplicar el concepto de órbita geoestacionaria para ubicar en ella satélites artificiales para comunicación de cobertura global. La aplicación de esta idea permitió el desarrollo de los sistemas de satélites comerciales que han tenido gran utilización a nivel mundial. Los satélites de comunicación pueden recibir y enviar desde el espacio ondas de radio en cualquier dirección que se tenga previsto en su diseño. Por medio de los sistemas de satélites se pueden establecer servicios públicos completos hasta el usuario final, como es el caso de televisión directa al hogar, servicios públicos apoyados parcialmente en redes terrestres de otros servicios como son redes privadas de voz y datos, etc. La figura (1) muestra el diagrama a bloques de un sistema de telecomunicación por satélite punto a punto. Este trabajo se basa en este tipo de configuración de enlace









Software Educativo para el Análisis y Diseño de Enlaces de Telecomunicación por Satélite 




, se presenta el desarrollo de un software educativo para analizar y diseñar enlaces de telecomunicación por satélite, este programa está desarrollado con LabVIEWTM y considera aspectos como son: ubicación de las estaciones terrenas transmisora, receptora y satélite, tasa de lluvia de las regiones terrestres, potencia de transmisión, tipo de modulación, tasa de transmisión de bits, ancho de banda, pérdidas atmosféricas, por borde, parámetros de las antenas, otras pérdidas misceláneas, etc. En la sección del satélite se consideran la frecuencia del enlace ascendente y descendente, su potencia isotrópica radiada efectiva (PIRE), figura de mérito. En base a las características del enlace mencionadas anteriormente, el software puede calcular la relación portadora a ruido del enlace de subida, bajada y total, distancias de las estaciones terrenas al satélite, relación de densidad de bit a ruido, probabilidad de error, etc. El programa le indica al diseñador del enlace si es factible de implementarse de acuerdo a las características dadas, en base a la probabilidad de error calculada. En caso de que no se cumpla con el requisitos mínimo de probabilidad de error, el usuario deberá cambiar algunas variables del enlace hasta que cumpla con los criterios de diseño establecidos. Palabras claves: Satélite, PIRE, Figura de mérito, Atenuación, Probabilidad de error



 DESARROLLO DEL SOFTWARE 
Se desarrolló el software de tal manera que se relacione con el diagrama a bloque mostrado en la figura, es decir, para la introducción de los datos se divide en tres secciones: Estación terrena transmisora, Satélite y estación terrena receptora. Además se tienen dos secciones de resultados, en la primera sección se muestran resultados del enlace ascendente y descendente, en la segunda sección se muestran resultados generales o totales del enlace de telecomunicación por satélite. La figura (6) muestra los detalles de los datos a introducir para la sección de la estación terrena transmisora, en esta figura se observa que se introduce el nombre de la ciudad, su localización (latitud y longitud), potencia de transmisión, tipo de modulación, banda de guarda, rizado del filtro, back-off del transmisor, tasa de bits por segundo. Además los parámetros de la antena, tales como: Diámetro, eficiencia y su elevación sobre el nivel del mar. También se consideran las pérdidas atmosféricas del enlace ascendente, pérdidas por borde, pérdidas en la línea de transmisión y otras pérdidas misceláneas (pérdidas por: gases, vapor de agua, etc.).






  • La figura siguiente muestra los detalles para introducir los datos de la estación terrena receptora, en esta interfaz se puede observar que se puede proporcionar como datos de entrada el nombre de la ciudad, su localización (latitud y longitud), tasa de lluvia de la región. Los parámetros de la antena, tales como: Diámetro, eficiencia y su elevación sobre el nivel del mar. Además se debe considerar las pérdidas atmosféricas, temperatura del sistema, pérdidas por borde, además otras pérdidas misceláneas (pérdidas por: gases, vapor de agua, etc.).



  • La figura que prosigue se presenta la interfaz gráfica para la presentación de los resultados del enlace ascendente y descendente, en esta sección podemos observar los datos que son calculados por el software, tales como: las ganancias de las antenas transmisora y receptora, distancias de las estaciones terrenas al satélite, ángulos de elevación y azimut, relación portadora a ruido.








 CONCLUSIONES Y RESULTADOS
 Se desarrolló un software educativo que nos permite analizar y diseñar enlaces de telecomunicación por satélite. El programa considera aspectos de la trayectoria como son pérdidas en: la trayectoria de espacio libre, por lluvia, atmosféricas y otras pérdidas misceláneas (vapor de agua y gases), ganancia de las antenas. Además considera la potencia de transmisión, ruido en el equipo receptor, ubicación de las estaciones y satélite, PIRE del satélite, ancho de banda del transpondedor, figura de mérito, etc. El software puede ser utilizado en universidades, centros de investigación donde se impartan cursos sobre sistemas satelitales, debido a que resulta bastante didáctico debido a la interfaz gráfica que presenta a los usuarios, se puede interactuar con el programa para cambiar ciertos parámetros del enlace y analizar las diferentes atenuaciones, ganancia de antenas, energía de bit sobre densidad espectral de potencia de ruido, relación portadora a ruido del enlace ascendente, descendente y total. Finalmente si la probabilidad de error del enlace total es menor a 1X10-6 se enciende un indicador verde lo cual muestra que el enlace es adecuado para su implementación, en caso contrario el enlace no será óptimo encendiendo un indicador rojo indicando al diseñador que deberá modificar previo análisis algunos parámetros del enlace satelital para que pueda ser confiable de implementarse. El software demostró ser fácil de utilizar y amigable para los estudiantes y profesores que lo han utilizado para el análisis y diseño de enlaces satelitales en la Universidad.








AUTOR; Erika Elizabeth Mtz Rodriguez N/L 27

sábado, 3 de octubre de 2015

¿Cómo están compuestos los Satélites Artificiales? - Blas Sanchez Frida Janeth




¿CÓMO ESTÁN COMPUESTOS LOS SATÉLITES ARTIFICIALES?




En la ingeniería de los satélites, como en cualquier otra área de la Astronáutica, confluyen múltiples aspectos. No sólo se trata de construir una máquina, sino también de conseguir que, a pesar de sus delicados elementos electrónicos, sea capaz de resistir los rigores y presión de un lanzamiento, las ondas acústicas durante el mismo y, sobre todo, funcionar en el ambiente del espacio, donde las temperaturas fluctúan entre los 200° C bajo cero durante periodos de sombra y 200° C a la luz del Sol.

El diseño de los satélites ha evolucionado desde aquellos años del Sputnik I hasta la actualidad; sin embargo, su razón de ser sigue siendo la misma, así como la de la mayor parte de sus elementos. El paso del tiempo y los logros en las tecnologías han proporcionado instrumentos más precisos, sistemas de provisión de energía eléctrica más potentes y componentes de menor peso, pero todos ellos, en esencia, no han cambiado mucho, hay quienes afirman que la Astronáutica es aún una ciencia demasiado joven.

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Los satélites pueden dividirse de manera conveniente en dos elementos principales, la carga útil y la plataforma. La carga útil es la razón de ser del satélite, es aquella parte del satélite que recibe, amplifica y retransmite las señales con información útil; pero para que la carga útil realice su función, la plataforma debe proporcionar ciertos recursos:
  • La carga útil debe estar orientada en la dirección correcta.
  • La carga útil debe ser operable y confiable sobre cierto periodo de tiempo especificado.
  • Los datos y estados de la carga útil y elementos que conforman la plataforma deben ser enviados a la estación terrestre para su análisis y mantenimiento.
  • La órbita del satélite debe ser controlada en sus parámetros.
  • La carga útil debe de mantenerse fija a la plataforma en la cual está montada.
  • Una fuente de energía debe estar disponible, para permitir la realización de las funciones programadas.
Cada uno de estos requerimientos es proporcionado por los siguientes conglomerados de elementos conocidos como subsistemas:
* Subsistema de Estructura, misma que puede tener muy distintas formas, pero que siempre se construye con metales muy ligeros que a la vez tienen gran resistencia.



* Subsistema de Propulsión, compuesto por múltiples motores o impulsores de bajo empuje, que sirven al satélite para realizar pequeñas correcciones y cambios de velocidad para controlar su orientación en el espacio y proporcionar el control adecuado de los parámetros de la órbita.
Últimamente, se están usando en estos motores otros métodos de propulsión como la eléctrica o iónica, cuyo bajo empuje, pero elevado impulso específico, los hace más eficientes y muy económicos en cuanto al consumo de combustible.
* Subsistema de control de orientación, que trabaja contra las perturbaciones a las que está sometido el aparato, como el viento solar.





Autor: Blas Sanchez Frida Janeth


CARACTERÍSTICAS DE LOS SATÉLITES ARTIFICIALES


Algunas de ellas son:

1. Recargan sus baterías con la recepción de ondas electro magnéticas provenientes del sol. 

2. Son puestos en órbita por medio de vehículos de lanzamiento espacial. 


3. Cuentan con un cicloscopio dinámico, es un aparato en su interior que lo mantiene en órbita.

 4. Pueden ser armas antisatelitales. 

5. pueden ser de comunicaciones.

 6. Son muy costosos.
 7. Pueden ser hechos para fotografiar y como telescopios de largo alcance. 

8. Al terminar su vida útil quedan varados en el espacio como basura espacial. 







Autor: Blas Sanchez Frida Janeth
N/L: 3




Aplicaciones de los Satélites Artificiales - López Morales Elsa Victoria

Aplicaciones de los Satélites Artificiales

Estos artefactos son muy útiles para el hombre moderno, son los protagonistas principales de las comunicaciones en el mundo; gracias a ellos, recibimos señales de televisión, de radio y teléfono, o tenemos información valiosa del clima, de nuestro medio ambiente y del espacio.
Hasta ahora tienen como principal objetivo estudiar la Tierra -superficie, atmósfera y entorno- y los demás cuerpos celestes. En el inicio de la exploración espacial, se consideró prioritario conocer las condiciones que imperaban sobre un objeto que girara repetidamente alrededor del planeta. Esto era necesario, pues poco tiempo más tarde el propio hombre debería viajar al espacio. Estos aparatos permitieron que el conocimiento del Universo sea mucho más preciso en la actualidad. Los satélites artificiales tienen muchas aplicaciones en la vida cotidiana. Muchos de ellos sirven para realizar telecomunicaciones, como el Internet, la televisión y el teléfono.
Otros satélites se utilizan para investigar el espacio exterior, las estrellas y galaxias y otros para observar fenómenos que ocurren en la tierra.
Existen además satélites, como la estación espacial internacional, que se utilizan para realizar experimentos científicos en el espacio.

Ø  USO EN TELEFONÍA Y TELEVISIÓN: En una primera fase, los satélites nacionales estadounidenses se utilizaron principalmente para comunicaciones telefónicas de larga distancia; las transmisiones televisivas aparecían sólo esporádicamente. En 1975. Un servicio estadounidense de televisión de pago, con menos de 60.000 abonados, anunció que utilizaría un satélite nacional para distribuir sus programas a las redes de TV vía cable de todo el país. El 30 de septiembre de 1975, Home Box Office Inc. (HBO) distribuyó a redes vía cables afiliados, de Florida y Mississippi, la retransmisión en directo del encuentro de boxeo, válido para el campeonato mundial de los pesos pesados, entre Muhammad Allí y Joe Frazier.



Ø  USO EN METEOROLOGÍA: Aunque las imágenes del tiempo proporcionadas por el Meteosat aparecen todos los días en las televisiones europeas, la mayoría de nosotros no nos damos cuente de hasta qué punto dependemos de las previsiones meteorológicas precisas. Solamente en términos de ahorro de recursos, la contribución de la meteorología europea es considerable.
 La importancia de la meteorología en muchos campos de la actividad humana hizo comprender rápidamente a Europa que, para las previsiones del tiempo, no era posible depender de otros países. Así, uno de los primeros empeños de la Agencia Espacial Europea fue precisamente lanzar satélites meteorológicos.
El primero de la serie fue puesto en órbita en noviembre de 1977. Se trataba del Meteosat-1, seguido del Meteosat-2 en junio de 1981. El Meteosat-3 fue llevado al espacio en junio de 1988; en marzo de 1989 le tocó el turno al Meteosat-4, llamado también MOP-1; en marzo de 1991 partió el Meteosat-5 o MOP-2 y, en noviembre de 1993, el Meteosat-6 o MOP-3. Actualmente, tres de ellos todavía están en activo: el MOP-1, el MOP-2 y el MOP-3, que giran alrededor de la Tierra a 36.000 km de altura en órbita geoestacionaria.


Ø  USOS CIENTÍFICOS: Para estudio del universo y de los cuerpos celestes, para fotografías la superficie terrestre y analizar suelos, relieves, recursos naturales y cualquier tipo de otra información que sea complicado su acceso.  
Constituyen la familia más numerosa, si se exceptúa la de los utilizados con fines militares. Ello es así por varias razones: en primer lugar, el espacio que circunda la Tierra es poco conocido; desde muchos puntos de vista interesa conocer la distribución de las radiaciones que abarcan toda la gama del espectro, desde los rayos X a las ondas de radio, meteoritos, capas ionizadas, campos magnéticos de origen no sólo terrestre, sino también solar e interplanetario, etc.
Algunos satélites han sido diseñados para obtener información sobre diversos aspectos relacionados con nuestro planeta: las capas ionizadas que lo rodean, la densidad y composición de la alta atmósfera, la intensidad de la radiación térmica recibida por la Tierra y el porcentaje que vuelve al espacio al reflejarse en las nubes o en la superficie, la confección de un mapa del campo magnético en torno al planeta, la naturaleza y energía de las partículas que componen los cinturones de radiación, características de la ionosfera en cuanto a transparencia a diversas frecuencias de radio, etc.

Ø  A INVESTIGACIONES ASTRONÓMICAS: Sobre todo en el campo de la radioastronomía. A este respecto, los satélites artificiales son muy útiles, ya que las radiaciones de determinadas longitudes de onda de procedencia interplanetaria son filtradas por la atmósfera y no pueden ser captadas por los radiotelescopios instalados en la superficie terrestre. Por tanto, la única manera de detectarlas es instalando equipos receptores por encima de la atmósfera.


Ø  ESTUDIO DEL SOL: las tormentas que a veces se desencadenan en la fotosfera, la evolución de las manchas solares y el “viento solar” o chorro de partículas subatómicas que continuamente son emitidas por nuestra estrella. También los hay especializados en la fotografía estelar, no ya en la gama de la luz visible, sino en la del ultravioleta, gran parte de la cual es retenida por la atmósfera. En cambio, los observatorios en órbita terrestre nunca se emplean para fotografiar planetas; es mucho más provechoso recurrir a sondas interplanetarias que sobrevuelan el objetivo a poca distancia, obteniendo imágenes mucho más detalladas.

Ø  USO COMO G.P.S.: El Global Positioning System es una red de satélites que identifica con extrema precisión cualquier posición, y gracias a la cual es imposible perderse. Hasta no hace mucho, todo aquel que se aventuraba en pleno océano sólo disponía para calcular su posición de la observación de las estrellas o del uso de la brújula y el sextante. Ahora, gracias a la moderna tecnología de los satélites, es posible efectuar esta operación de un modo más sencillo.
Con la simple presión de un botón de un pequeño instrumento portátil, el Global Positioning System (Sistema de Posicionamiento Global), podemos determinar nuestra posición con un error de pocos metros. Esta tecnología va destinada a pilotos, marinos, alpinistas y a cualquier individuo que desee o deba conocer su propia posición con un margen de error muy pequeño.
El empleo de satélites para la navegación o la determinación de localizaciones no son nuevo. En 1959, la Marina militar norteamericana lanzó su primer satélite Transit para uso de los submarinos lanzamisiles Polaris y de los buques de combate de superficie; este sistema permitía determinar la posición con un error de 150 metros.
El Global Positioning System es todavía más preciso. Establecido y controlado por las fuerzas armadas estadounidenses, utiliza una red de 24 satélites Navstar, 21 de los cuales están en activo y tres son de reserva, colocados en seis planos orbitales que se cruzan a una altura de 20.000 km. El primero de estos satélites fue lanzado en 1978, pero el sistema no llegó a ser operativo hasta 1987, cuando hubo en órbita 12 satélites; en diciembre de 1993, la red quedó completada. 



Ø  REGISTRO DE METEORITOS: Desde los primeros años de la investigación espacial, uno de los puntos de estudio más importantes fue investigar acerca de la abundancia y distribución de micro-meteoritos en las proximidades de la Tierra. Estos son partículas que en general no superan el milímetro de diámetro y que, moviéndose a enormes velocidades, a veces entran en la atmósfera terrestre, donde la fricción del aire los desintegra.
Al principio se exageró mucho acerca del peligro que los meteoritos representarían de cara a futuros viajes espaciales tripulados. Hoy se sabe que las partículas de más de un milímetro de diámetro son muy raras, tanto que una nave podría permanecer en el espacio durante años sin encontrar ninguna en su camino. En cuanto a los granos de polvo cósmico, aunque más abundantes, tampoco ofrecen motivo de preocupación. Por lo general se volatizan al chocar contra las paredes del vehículo, por muy delgadas que éstas sean.
En 1965 se lanzó el primero de los grandes satélites Pegasus, destinados exclusivamente al estudio de los meteoritos, listaban equipados con unas grandes “alas” constituidas por más de doscientos elementos sensores: dos láminas de cobre o aluminio separadas por una de material aislante, con lo que formaban otros tantos condensadores eléctricos, cargados a una tensión de 40 voltios. Cada vez que un meteorito atravesaba una de tales células, el calor desarrollado en el impacto vaporizaba parte del metal y el aislante, estableciendo un momentáneo corto circuito entre las dos láminas. A continuación, el condensador se descargaba y transmitía a In Tierra la correspondiente señal. Una vez disipado el vapor, el condensador volvía u cargarse y quedaba en disposición de registrar nuevos choques.
Durante su primer año de funcionamiento, y por metro cuadrado de superficie sensible, el Pegasus 1 detectó 57 partículas con energía suficiente para atravesar 37 milésimas de milímetro de aluminio; cinco en sus células de 2 décimas de milímetro y sólo dos en las de 4 décimas.


Ø  MEDIDA DE LAS RADIACIONES: La radiación es una forma de energía que se encuentra en el espacio en múltiples formas. La luz corriente es radiación; las ondas de radio, los rayos X e incluso el calor emitido por un cuerpo a cualquier temperatura también lo son. Todas ellas se agrupan bajo la denominación común de “radiación electromagnética”; el único factor que permite diferenciarlas es su frecuencia o longitud de onda.
En cuanto a la medición de las radiaciones ultravioletas e infrarrojas, existen dispositivos fotoeléctricos sensibles a diferentes bandas de frecuencias, de modo que resulta muy fácil seleccionar la que se desea estudiar. Ciertos tipos de satélites disponen de mecanismos de orientación para mantener tales sensores continuamente dirigidos hacía la fuente de radiación, por lo general el Sol o la propia Tierra.

Ø  ESTUDIO DEL MAGNETISMO: El campo magnético que rodea nuestro planeta es el resultado de la superposición de varios campos de origen diverso: el propio campo magnético terrestre, el solar y el de origen galáctico, que en conjunto originan un cuadro de enorme complejidad, sujeto, además, a incesantes variaciones.
Por lo general, los magnetómetros de que van provistos los satélites artificiales son instrumentos tan sensibles que pueden ser  perturbados incluso por las corrientes eléctricas que circulan por los equipos de a bordo del satélite o por sus piezas metálicas. Por tanto, los dispositivos sensores se mielen situar en el extremo de largas pértigas que se despliegan automáticamente al entrar en órbita.





Usos de los Satélites Artificiales





Autor: López Morales Elsa Victoria 
N/L: 23


Tipos de Satélites Artificiales - López Morales Elsa Victoria

Tipos de Satélites Artificiales 


Más de 5.000 satélites artificiales inundan el espacio exterior de nuestro planeta. La mayoría de ellos, unos 4.000, se encuentran a unos 700 kilómetros de distancia y, el resto, en la órbita geoestacionaria que se localiza a unos 35.000 kilómetros.

La carrera ha sido frenética desde que el 4 de octubre de 1957 se lanzó el primer satélite. Fue el Sputnik 1, que impulsó la extinta Unión Soviética. Desde entonces la tecnología de los satélites ha evolucionado tanto que los actuales son capaces de diferenciar un camión de un coche desde cientos de kilómetros de distancia, si un petrolero está limpiando sus tanques en el océano o dónde ha surgido el foco de un incendio.

Satélite Sputnik 1

 Los satélites, aunque no lo parezca, funcionan de una forma muy simple: se les envía una señal desde la Tierra y ellos la rebotan hacia el lugar que se les indique.

Se pueden clasificar los satélites artificiales utilizando dos de sus características: su misión y su órbita:
Por el tipo de misión:

Ø  Satélites Científicos: Realizan una gran variedad de misiones científicas. El satélite científico más famoso es el Telescopio Espacial Hubble, ubicado en una órbita a 559 kilómetros de altura con un período (tiempo en completar una vuelta alrededor de la Tierra) de 96-97 minutos, una longitud de 13,2 metros y una masa de 11.110 kg; se ha encargado durante años de tomar las imágenes provenientes de los lugares más lejanos del universo con que cuenta la humanidad ubicados a miles de millones de años luz de la Tierra. También existen otros satélites científicos que investigan todo tipo de fenómenos naturales que van desde manchas solares hasta rayos gamma.





Ø  Armas anti satélite: también denominados como satélites asesinos, son satélites diseñados para destruir satélites enemigos, otras armas orbitales y objetivos.


Ø  Satélites astronómicos: También conocidos como telescopios u observatorios espaciales, estos satélites tienen el objetivo de registrar y observar la actividad en otros cuerpos celestes para su estudio, tal como lo haría un telescopio terrestre, aunque sin las limitaciones de este último.




Ø   Biosatélites: Estos satélites están capacitados para trasladar organismo vivos, como animales y plantas, para el estudio de su comportamiento en el espacio exterior. Hoy en día no son muy populares debido a la restricción de la experimentación sobre estos seres vivos.






Ø  Satélites de comunicaciones: Permiten conversaciones telefónicas y envío de datos a través del satélite. El elemento más importante de un satélite de comunicaciones es el transpondedor (un receptor de ondas de radio que recibe una conversación a cierta frecuencia y luego la amplía retransmitiéndola nuevamente a la Tierra en otra frecuencia. Normalmente un satélite de comunicaciones contiene cientos o incluso miles de transpondedores que permiten miles de comunicaciones simultáneas. Los satélites de comunicaciones tienen órbitas geoestacionarias, así las antenas en la Tierra que les envían y reciben las señales no se tienen que mover y siempre apuntan hacia la misma dirección del cielo donde el satélite se encuentra.

Ø  Satélites de navegación: Utilizados para que los aviones y barcos puedan navegar, aunque en los últimos años han sido puesto a disponibilidad civil, ya que hoy todo tipo de vehículos civiles hacen uso de ellos a través del servicio brindado por los satélites de GPS (Global Positioning System o Sistema de Posicionamiento Global) de la serie NAVSTAR de fabricación y administración estadounidense.


Ø  Satélites de reconocimiento: denominados satélites espías, utilizados por militares u organizaciones de inteligencia.

Ø  Satélites de observación terrestre: No tienen fines militares. Observan cambios de todo tipo en distintas regiones del planeta, como por ejemplo deforestaciones, cobertura de hielo en los polos o zonas de glaciares, crecimiento y desarrollo de zonas urbanas, temperaturas promedio de distintas regiones del planeta, movimiento de continentes, etc. Los más famosos son los satélites de la serie LANDSAT de origen estadounidense.



Ø  Satélites de energía solar: son una propuesta para satélites en órbita excéntrica que envíen la energía solar recogida hasta antenas en la Tierra como una fuente de alimentación.


Ø  Satélites meteorológicos: Destinados a reportar la actividad meteorológica de la Tierra, como el tiempo atmosférico y el clima de la Tierra, son muy útiles a la hora de prevenir o anticipar catástrofes naturales, o comportamientos anormales de los fenómenos climatológicos. Son una herramienta esencial para que los meteorólogos puedan predecir el clima o conocer lo que está sucediendo en el mismo instante en distintas regiones de un país o del mundo. La mayor parte de los satélites meteorológicos fueron fabricados por Estados Unidos, Rusia, Japón, Francia, y en parte Alemania, Italia y Gran Bretaña. Son administrados por Estados Unidos, Rusia, Japón y un consorcio de naciones europeas. Algunos de los satélites climáticos más famosos incluyen a las series TIROS (Televisión Infra red Observación Satélite - Satélite de Observación Infrarroja para Televisión. Aunque hoy son conocidos como NOAA por ser administrados por la Nacional Oceánica and Atmospheric Administration o Administración Oceánica y Atmosférica Nacional); KOSMOS (de la Unión Soviética y luego Rusia); GOES (satélites estadounidenses cuyas siglas significan Geostationary Operational Environmental Satellite o en español Satélite Operacional Ambiental Geoestacionario) y METEOSAT (una serie de satélites meteorológicos europeos construidos por las empresas de tecnología aeroespacial francesas Aérospatiale, Cannes Mandelieu Space Center, Matra, la alemana MBB, la italianas Alenia Aeronautica, y la británica Marconi Company). Esto satélites cuentan con cámaras que envían fotos del clima terrestre, algunos desde una posición fija geoestacionaria (a 35.786 kilómetros de altura siempre fotografiando la misma franja del planeta) y otros desde órbitas polares (que giran de polo a polo a unos 850 kilómetros de altura, completando una revolución en 100 minutos, por lo que cada vez que hayan completado una vuelta la Tierra ya ha girado unos 25°, permitiendo así que fotografíen una franja distinta tras cada vuelta). Los satélites climáticos geoestacionarios son los de la serie GOES (hacia 2013 con cuatro satélites en operación que cubren varias partes del globo terrestre, y siendo el GOES-10 el que cubre el clima de América) y los METEOSAT europeos; mientras que los de órbita polar son los de la serie TIROS (también conocida como NOAA).



Según su peso y la órbita en la que se encuentren:

Ø  Satélites De Transmisión Televisiva: Son iguales a los satélites de comunicación y son utilizados para enviar señales televisivas de un lugar a otro para permitir transmisiones en vivo o el envío de señales de empresas de televisión satelital (como Direct TV) de la estación de transmisión a las casas de cada uno de los clientes suscriptos. 



Ø  Satélites De Rescate: Responden a señales de radio de vehículos extraviados (por ejemplo buques en peligro o aviones caídos en zonas inhóspitas) las cuales son enviadas a equipos de rescate para situaciones de emergencia.

Ø  Satélites Militares: Son satélites que aunque estén ahí arriba nuestro, su información es confidencial. Este tipo de información incluye inteligencia estatal que hace uso de equipos sofisticados de fotografía de alta tecnología electrónica, para reconocimiento de actividades en distintos países del mundo (operaciones militares de países investigados, búsqueda de narcotraficantes y grupos paramilitares, etc.). Algunas de sus aplicaciones incluyen el relevamiento de datos de comunicación encriptados entre distintos puntos de la Tierra, monitoreo de operaciones con energía nuclear, observación del movimiento de tropas, alerta de lanzamiento de misiles, fisgoneo fotográfico de distintas regiones del mundo, etc. Por lo que toda actividad realizada hoy en la Tierra puede ser tranquilamente observada por las Fuerzas Armadas de los países más poderosos del mundo gracias a estos satélites que literalmente pueden observar todo lo que sucede aquí abajo.




Los Satélites Artificiales









 Autor: López Morales Elsa Victoria
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